domingo, 28 de diciembre de 2008

El Amigo Imaginario

Aporte de Kri Kri, gracias hermano...

Para empezar a hablar sobre el amigo imaginario pues debo aclarar algo soy hijo único.

Durante los primeros años de estar en este mundo no sabes lo que significa la sociabilización de cuan importante puede llegar a ser, pero luego una vez que empiezas a crecer a pensar a "relacionarte" con otros, te fijas que para el ser humano es muy importante estar con personas que compartan cosas contigo, cuando eres niño por supuesto lo importante es jugar, a lo que sea pero jugar. Ahora viene lo complicado cuando empiezas a observar que en tu entorno cercano que no existe una persona con esas características alguien con quien compartir travesuras, o cuando en navidad te regalan un juego de raquetas de ping pong para dos o en el Nintendo te vienen dos controles o si necesitas algún cómplice para alguna travesura en casa, en ese momento, hablo personalmente, es cuando integre a mi vida a un amigo, totalmente incondicional, el que siempre podía jugar conmigo, al que le gustaban mis juegos, el que jamas me ganaba, el que hacia las travesuras en vez mía, el que se ideaba algo para estar entretenidos, pues un amigo que todos quisieran tener pero que solo existía para mi, el que fue creciendo junto conmigo, quien luego en mi adolescencia siguió siendo un gran amigo, solo que con una diferencia, empezó a crecer con un carácter diferente al mio mas sociable, mas arriesgado, mas descomplicado, se convirtió en lo opuesto a mi, como es esto, pues mientras yo no era exitoso con mis compañeras del colegio él si lo era, mientras yo no era seleccionado en fútbol, él si y no solo eso era el capitán y mejor jugador mientras yo no tocaba ningún instrumento musical el sí, entre otras cosas. Así pasaron los años, en conclusión llegue a definir que mi amigo imaginario era la imagen que me gustaría proyectar de mi mismo, y si se preguntan si aún vive en mi pues sí y creo que siempre lo hará, es mas actualmente el es completamente feliz ya que encontró el amor, mientras yo no puedo tener a la mujer que amo.

El arma mas fuerte del hombre es su imaginación, disfruten de ella que es lo mas privado que tenemos, al menos hasta que la tecnología de esta sociedad injusta invente algo para invadirla...

Al final aclaro algo, mi amigo imaginario no es como aquellos duendes de un capitulo del Chapulín colorado, jamas lo vi, siempre lo he imaginado.

Kri Kri

sábado, 13 de diciembre de 2008

La sonrisa pícara

Aporte de Otaner. Dios le pague! Ja.

Con mi lonchera tomate sin dibujos ni calcomanías salía al recreo de jardín de infantes, dentro llevaba varias golosinas, ninguna tan importante como el paquete individual de galletas rellenas, las otras eran mías pero éstas estaban a punto de conocer a la dueña que las iba a saborear...

Una blusa blanca, un saco rojo amarrado por la cintura, y un cabello negro hecho cachitos recogidos con esas binchas de bolitas que parecían de cristal pasaban frente a mi con la sonrisa más dulce y tierna -que es posible que nunca vuelva a captar algo así- del pasillo, regresando a mirarme e invitándome a tomarla de la mano... María Fernanda, quien había robado mi corazón y unas cuantas risas de vergüenza también, era quien iba a portar mi dulce regalo en su recreo.

Bajamos las gradas, y mientras nadie nos viera era hermoso tomar su mano, pero cuando nos estaban viendo, sobre todo los niños, la audacia entró en acción y soltamos las manos cerca de mi espalda como si sólo estuviéramos agitando los brazos.

"Te traje galletas" le dije, y cuando me miró pensé recibir un "gracias", "que rico", "mis preferidas", cualquier palabra hubiera sido gratificante para mi en señal de corresponderme el presente que le traía y que me había robado de la alacena de la cocina de mi casa… lastimera sorpresa tuve cuando dijo "El Tito también me dio unas igualitas" y vi como guardaba el paquete en su lonchera rosada de Hello Kitty junto con otros dos paquetes similares, sin embargo el momento más hermoso de mis seis años estaba por comenzar cuando luego de sacar un jugo y cerrar su lonchera me dijo con sonrisa pícara "Las tuyas han de estar más ricas".

Otaner